martes, 17 de junio de 2014

CUANDO OLULA ESTABA EN AUGE ECONÓMICO

OLULA DEL RÍO
“EVOLUCIÓN ECONÓMICA DE UN PUEBLO EN AUGE”
Como contraste provincial, Olula es un municipio poco centrado en las labores agrícolas: las pequeñas superficies de cultivo activas están dedicadas principalmente a almendros y olivos. En las proximidades del pueblo hay tierras de regadío en las que se practica la agricultura para el consumo propio.
La riqueza básica de nuestro pueblo es la explotación y transformación del mármol, que, unido al gran auge de sus servicios comarcales aquí ubicados, hacen de la localidad el centro neurálgico de la Comarca del Alto Almanzora.
La explotación del mármol comenzó en tiempos remotos, pero se consolida a comienzos del siglo XIX, conociéndose el origen de las primeras fábricas en 1.850, que se localizaban principalmente en Fines; “los telares del país” que aprovechaban el agua de los arroyos para hacer funcionar las máquinas y las ruedas de madera eran las que accionaban los telares.
Es a partir de 1.945 cuando, debido a la energía eléctrica, serrerías, modernización de los talleres, la gran revolución tecnológica que se operó en el sector, la incorporación de los compresores de gasóleo en las canteras, telares de diamante, cortabloques, pulidoras, fábricas y trabajo del pueblo empezaron a conocer la época de gran desarrollo industrial. Olula llega a ocupar el número 20 en cuanto a “renta per capita” en Andalucía. El Polígono Industrial que se ubica al Norte de la población, se fundamenta principalmente en la industria del mármol. Las empresas allí instaladas, son medianas empresas, muchas de ámbito familiar y dedicadas a la solería, aplacados, escaleras, morteros, balaustradas, artículos de cementerio y mil cosas más de regalo.
La artesanía es la propia del mármol y se hacen en talleres especializados. Hay objetos decorativos como chimeneas, ceniceros, jarrones columnas, estatuas, relojes, morteros, almireces, tableros de ajedrez con sus piezas y mesas, etc.
La Asociación de Empresarios del Mármol trabaja en la creación de signos de identidad, mejora de la calidad, búsqueda de mercados y competitividad para una mejor venta de los productos. Todo ello englobado en el Proyecto del Plan Estratégico y la creación del Centro Tecnológico Andaluz de la Piedra Natural.
De los 22.000 millones de ventas del año 1.990, se pasó en la etapa de la depresión en 1.993 a 16.000 millones de pesetas, con la recuperación en 1.995 que ha rebasado los 23.000 millones de pesetas y la entrada en los mercados internacionales con la marca Macael, compitiendo en calidad y precio con Italia y Portugal.
NOTA: Este informe se refiere a la situación económica de la Comarca al final de los años 90. Ya quisiéramos estar a día de hoy en parecidas circunstancias.
Juan Sánchez 2.014

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